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domingo, 13 de febrero de 2011

"COMO ENTRENAR A TU DRAGON" OCULTO

A mis hijos
Me gustan estas películas valientes que empiezan fuerte, con toda una batalla campal que, como los buenos fuegos artificiales, sabemos que terminará con una traca final aún mayor. En unos primeros minutos fantásticos, llenos de acción, son capaces de ir presentándonos a todos los personajes principales quedando perfectamente "dibujados" en pantalla, y lo logran sin perder en ningún momento el ritmo del enfrentamiento, manteniendo una difícil tensión entre cómica y dramática en un tono que nos va avisando de que estamos ante un trabajo con cualidades de buen cine.

Sabemos que nuestro joven protagonista tiene abiertos varios frentes, tan ancestrales como aquellos que confrontan a generaciones de hombres y dragones: el amor... hacia una joven guerrera, la frustración... por sus límites físicos, la decepción... indisimulada de su poderoso padre, la burla... de sus compañeros de edad, la desconfianza... y sobreprotección de los adultos que le rodean. Cierto, no es capaz de sostener un arma de combate, porque como a Vicky el vikingo, pronto descubrimos que su corazón enamorado, más tenaz que valiente, riega su cerebro en mayor medida que sus músculos y que aún le queda someterse a uno de los retos más grandes de su vida: la primera y vital elección que plantea este film, aquella que nos enfrenta a nuestros mayores miedos, y da la medida de lo que somos y lo que podremos llegar a ser, arriesgándolo todo por una corazonada, demostrando que verdaderamente la inteligencia es emocional. La segunda le llevará a decidir entre el reconocimiento de los demás o el autoconocimiento, entre lo que nos han enseñado o lo que descubrimos por nosotros mismos, entre lo que esperan los demás de nosotros o lo que creemos que es ético o justo.
 
Aunque a veces la distancia entre ellos parezca insalvable, todo adulto lleva dentro de sí un niño, y todo niño oculta un dragón que hay que entrenar, para que le ayude a salvar los obstáculos y no a chocar con todo lo que se le ponga por delante, de la misma forma que un joven lleva un adulto que en algún momento tendría que salir. En el corazón de esta película laten todas estas pulsiones y, como decía, hay un momento decisivo en que parecen detenerse, dándose cita en un mismo escenario todas esas líneas de fuerza; es un instante de gran valía ética y valentía pedagógica, en el que el joven protagonista se debate preso de sus lazos biológicos, familiares y culturales, entre sus viejos anhelos de gloria en la batalla y las nuevas lecciones de solidaridad, en busca de una salida revolucionaria al borde del sacrificio, para luego continuar de una forma más convencional, en una tercera elección ya dentro de la épica heroica, pero sin dejar de mostrarnos detalles de una decidida voluntad de superación tanto individual como colectiva y apostando por los jóvenes como responsables de un difícil, pero necesario y liberador cambio de visión.

En la actualidad, creo que esta película aporta, no sólo, un entretenimiento para distraernos del pesimismo reinante, sino también una lectura positiva de las nuevas relaciones que pueden nacer en tiempos de dificultades, y en la necesidad de arriesgar y dar una oportunidad a los valores que llevamos dentro y que quizás podemos llegar a reconocer en los demás, entrenando nuestros pequeños miedos, aún sabiendo que siempre existirá ese pulso contra el gran monstruo devorador que se esconde en lo más profundo, tras espesas nieblas de desconfianza y desconocimiento.

Sí, esta película basada en el libro infantil de Cressida Cowell, nos habla de valores como la amistad, el esfuerzo en equipo, la aceptación integral del ser querido y la superación de la discapacidad, pero no hay que engañarse, aquí también se viven la aventura y el romanticismo puros, haciéndonos volar al son de una emocionante banda sonora compuesta por John Powell, arriesgando nuestras vidas entre abismos al borde del mar, alcanzando el cielo más allá de las nubes, y arrastrándonos al infierno dentro de la tierra, a lomos de lo más oscuro de la noche que puebla nuestra imaginación y las más antiguas mitologías.

Últimamente en el cine se han visto muchas variantes de alianzas entre jinetes y dragones: la de “Las crónicas de Narnia: la travesía del viajero del alba” o las de “Avatar” que recordaban a las de “Dinotopía”, pero ya en la antigüedad existían simbiosis de esta naturaleza, como en la mitología china donde el dragón simbolizaba ese ser intermediario que posee la doble naturaleza capaz de resolver los opuestos, dominar los cuatro elementos y servir de montura al inmortal Huang-ti para subir al cielo. Los propios vikingos navegaban a lomos de los barcos llamados drakkars (dragones), cuyo mascarón de proa representaba una cabeza de dragón, e incluso en la misma mitología nórdica, héroes como Beowulf o Sigfrido, lucharon contra dragones que custodiaban tesoros.

La riqueza que atesora el dragón protagonista de esta película no está guardada ni en cofres, ni en grutas, sino en su interior, y se abre al contacto de una mano tendida entre el niño que se muere de miedo y curiosidad y el adulto que nace para demostrarnos una vez más el valor de la amistad, y que ésta se encuentra allí donde menos te lo esperas.

14 comentarios:

  1. Preciosa entrada Txusfin.

    Comentábamos hace unos dias el tema de los premios y las quinielas.. ¿a quién no le gusta jugar? es parte de ser niño y ojalá algo que no perdamos nunca de adultos. Comentaba hace un rato sobre la protagonista de "Valor de ley", acerca de esos valores que conviene tener como ejemplo, con los que podríamos decir que practicamente nacemos, y que por circunstancias perdemos en cierta medida cuando vamos creciendo. Por tu visión de la película, diría que es un buen espejo en el que mirarse y evaluarse, un buen ejemplo para los niños.

    En esas quinielas que comentaba, aparece como favorita en el campo de la animación "Toy Story 3", que incluso suena como candidata en la categoría general. Pero curiosamente, en muchas quinielas he encontrado opiniones que sitúan a "Cómo entrenar a tu dragón" a la estela de la película de Pixar, e incluso por encima, no sólo por su calidad sino por las buensa sensaciones que también ha producido ésta película en sus espectadores.

    No he visto ninguna de las dos, visionado que me autoimpongo para este año, sobretodo en el caso de ésta última, al leer tu emocionante entrada.

    Un saludo!

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  2. Gracias Syrio, emocionante también tu comentario.

    “Cómo entrenar a tu dragón” viene de ganarlo todo en los premios Annie, considerados los Oscars de la animación, pero bajo la sombra de la sospecha de un sistema de votación que parece favorecer claramente a DreamWorks (están inscritos entre los votantes todos los empleados de la compañía) y que ha denunciado Disney-Pixar junto con su retirada de la competición.
    Los Oscars son otra historia, aquí yo creo que Pixar siempre ha estado muy bien valorada, aunque este año tiene un rival de su altura. Va a ser uno de los grandes pulsos de la noche.

    Yo lo tengo más fácil, me quedo con las dos: “Toy Story 3” es un gran final para una trilogía pionera en el mundo de la animación y cuenta con la ventaja de que ya conocemos a los personajes y puede dedicar más tiempo a desarrollar otros aspectos, mientras que “Cómo entrenar a tu dragón” inicia su propia saga (la 2ª entrega está prevista para el 2013) y lo hace con energía, inteligencia y sensibilidad. Ambas técnicamente sobresalientes.

    Además saben transmitir grandes dosis de esos valores de los que venimos hablando, lo que las hace especialmente valiosas, pues atraen a un público muy amplio, tanto por edades como por países, alcanzan éxitos de taquilla y encima ganan premios, una prueba irrefutable de que aún en tiempos de crisis esos valores “universales”, bien presentados, siempre serán rentables en todos los aspectos.

    Un saludo y espero que las disfrutes!

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  3. A tu acertada y completa entrada me gustaría añadir que esta pelicula tiene un sentido del humor inteligente, que no llega a ser cansino y no tiene ese tufillo graciosillo machacón con personajes cargantes típico de muchas pelis de dibus.
    Lo mejor, a parte de la historia y de los valores que expone, es la música como tú muy bien dices, que le da una fuerza impresionante, y el diseño de los dragones, que aunque no hablen(ésto me parece muy acertado) tienen una gran expresividad y chispa.
    Es verdad, a ver quien gana el pulso Toy Story-Dragoncito, así le da más interés a los Oscars, aunque yo me inclino un pelín más por "como entrenar a tu dragón" quizás por la novedad....aunque las 2 son magníficas!

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  4. Si, tienes razón, su sentido del humor es otro de sus puntos fuertes, está perfectamente integrado en la acción y nunca parece forzado. Han sabido aprovechar las posibilidades de la animación para sacar toda su gracia a los dragones y compensar su fama destructiva. En el fondo se trata del encuentro de dos tipos de ingenuidad, la de los niños y la de los dragones, que da como resultado un conjunto de situaciones peligrosamente divertidas y aleccionadoras.

    Buen equilibrio entre la comedia y el drama, buena música…tiene de todo para ser una buena candidata al Oscar y, como bien dices, es tan magnífica como “Toy Story 3”, así que gane quien gane, al final ganará el buen cine y ganaremos todos.

    Un saludo y gracias por tu aportación!

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  5. Muy interesante tu blog, txusfin, lo he agregado a mi blogroll para tenerlo controlado :) Es una lástima que mis ojos toleren tan mal las letras blancas sobre un fondo negro...
    Un saludo.

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  6. Muchas gracias Ricardo,
    Una grata sorpresa y una gran alegría recibir tu comentario y un honor aparecer en tu blogroll al lado de blogs de una calidad admirable, muy por encima de las dimensiones y de las posibilidades del mío, un tanto ocasional, pero con la ilusión renovada gracias a tu visita y a tu acogida.
    Lamento el efecto del color negro, a mí también llega a cansarme un poco, fue una elección más conceptual que práctica, por aquello que en el fondo tienen en común la cueva, la cámara oscura o la sala de cine.
    Un saludo.

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  7. Hola, me ha encantado tu comentario.
    La película me pareció bastante entretenida, como tú dices, defiende valores que no le vienen nada mal a la sociedad actual.
    Y la banda sonora me pareció mejor que la de La Red Social, esperaba que se llevase el óscar...lástima.
    Un saludo.

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  8. Hola María, yo también creo que es una película muy completa, una propuesta en principio familiar, que tiene el mérito de que se disfruta con facilidad, y que sin ser pretenciosa, permite además una rica lectura a distintos niveles.
    Los films de animación van ganando un merecido reconocimiento, y ya se empieza a hablar de la posibilidad de que algún día sean candidatas a ganar el Oscar a la mejor película de ficción. Y hablando de Oscars, a mí también me encantó su vibrante banda sonora, la escucho a menudo, bastante más que la de “La red social”, sin duda hubiera sido una justa ganadora.
    Muchas gracias por desplegar tus alas y acercarte a este pequeño blog, una gran alegría recibir tu visita y leer tu comentario.
    Un saludo.

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  9. Hola txusfin, llego a tu blog después de leerte varias veces en el blog amigo de Ricardo Pérez. Después de ojear tu trabajo sólo me queda felicitarte por los contenidos y el enfoque tan original que has utilizado para desarrollar tu discurso.
    Felicidades, te sigo desde hoy y aprovecharé tu alto en el camino pera profundizar en tus entradas antiguas.
    Un saludo.

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  10. Muchas gracias David, no te imaginas la ilusión que me ha hecho tu comentario. En un fin de semana de despedidas, poder darte la bienvenida como seguidor es una inyección de ánimo que no tiene precio y siempre será un estímulo añadido para volver lo antes posible.

    He disfrutado compartiendo contigo la sección de comentarios de ese admirable blog que nos regala Ricardo, a través del cual llegué hasta el tuyo, y sólo la falta de tiempo crónica que ahora se agudiza, me ha impedido participar en él. Enhorabuena, lo considero uno de los blogs de cine más vivos y completos de la red. Traslada, por favor, un saludo y mis felicitaciones también a Cristina.

    A pesar del alto en el camino, dejo las puertas abiertas, y aprovecho la ocasión para abrir una ventana más en mi lista de blogs amigos y añadir el tuyo. Así, todo el que se acerque hasta aquí sólo tendrá que hacer un pequeño trasbordo, y podrá continuar este apasionante viaje de la imagen en movimiento a través de ellos.

    Un saludo.

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  11. Hace mucho que no se sabe de ti, espero que todo vaya bien.
    Un saludo, estimado cinéfilo.

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  12. Hola Ricardo,
    Va bien, tal como están los tiempos, soy un afortunado pudiendo atender responsabilidades familiares y laborales cada vez más exigentes.

    Intento acercarme de vez en cuando al blog y no me gustaría dejarlo morir; espero poder insuflarle algo de aliento en vacaciones, pero lo que más hecho de menos es leer vuestras entradas y el intercambio de comentarios, reconozco que hay veces que lo disfruto más que ver el cine que nos ofrece la cartelera actual... menos mal que se acerca Cannes.

    Gracias por acordarte e interesarte por mí, detalles como el tuyo son los realmente dan vida a un blog y ánimos a un cinéfilo.

    Un sincero y cordial saludo.

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  13. Hermosa película. A pesar de todo, siento que al final no se le da la libertad total al Dragón: queda como ellos dicen -- una mascota. Ojalá en la segunda parte ya muestren a los dragones 100% libres como criaturas de la naturaleza que son (se supone que no tienen ya razón para atormentar a un pueblo).

    =)

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  14. Es posible Ian, quizás han preferido resaltar la libre elección de una amistad arriesgada, pero enriquecedora, por encima de la libertad individual. Es verdad, que no parece en todos los casos una relación de igual a igual, y que el humano parece llevar casi siempre “las riendas”, así que espero que tengas razón y que en la próxima entrega, aparte de los rasgos emocionales y divertidos, les añadan a los dragones un mayor nivel de inteligencia y libertad.

    Gracias por tu visita y por tu interesante opinión.

    Un saludo.

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